La Capilla de los Llanitos

El inicio de la temporada de vacaciones del año 1955 en el caserío del Llanito a orillas del río Bayano.

El inicio de la temporada de vacaciones del año 1955 en el caserío del Llanito a orillas del río Bayano.

Oderay Escobar convocó sus primos mucho de ellos se había marchado a la capital.

Emprendieron la tarea de traer de vuelta la imagen de Arcángel Rafael al Llanito.

En años anteriores los fundadores de la comunidad encontraron en medio de las ruinas de un antiguo fortín español. Lugar construido por los colonizadores para vigilar todos los negros cimarrones quiénes se escapaban al monte.

El fortín San Rafael de Terables.

Luego de algunos años decidieron restaurar la imagen del Arcángel Rafael el cuál no tenía la mano ni el pez.

Construir una capilla de cemento, el altar para la imagen, bancas para sentarse el anda para el paseo de la imagen, para eso se necesitaba DINERO y mucho trabajo. Durante dos años los hermanos Miguel, Félix, Arsenio Escobar, los primos José Félix (Chefeli cómo se le decía cariñosamente, Antonio y el jefe de la construcción Bony… Clavaron, pegaron y construyeron la pequeña capilla con una puerta de arco y está quedó hermosa y lista para la celebración.

Se hicieron las invitaciones para la fiesta, se limpiaron los predios, se arreglaron los embarcaderos, se construyeron aleros para guardar los caballos y para albergar los hombres, las mujeres fueron alojadas en las casas del pueblo del Llanito.

Recordemos que no había carreteras ni teléfonos móviles. Aun así, en la primera semana de marzo con la ayuda de las señoras del pueblo las hermanas y primas Ludovina Guardia Lucía, Domingo Matute, María Lasso, María de Guardia y Rosa de Guardia iniciaron los novenarios.

El día viernes llegó el sacerdote de Chepo Venancio Fenosa Pascual para la última novena.

Los jóvenes y niños también los adultos estaban muy contentos. Empezaron a llegar los invitados por el río en canoas, a caballo otros caminado se formó la fiesta.

Llegó un conjunto de música popular instalando su equipo y un generador.

Los niños y niñas del pueblo decoraron el pueblo confeccionando arcos de hojas de palmas, ramilletes de flores naturales y papel de color. Se formó la fiesta ese día oraron, cantaron y bailaron hasta el amanecer y así fue por muchos años.

Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *